
El miércoles 11 de septiembre, nuestra comunidad se congregó en el Santuario para celebrar una emotiva Misa de Acción de Gracias, con motivo del 25° aniversario de nuestro colegio. En un ambiente lleno de gratitud y bajo un cálido sol, la ceremonia fue presidida por el capellán, Padre Víctor Pérez, quien invitó a la reflexión sobre el significado de este importante hito.
Durante la misa, el Padre Víctor subrayó la importancia de “conquistar el presente” para Dios, con la visión de dejar una herencia valiosa para las generaciones futuras. Destacó que, al forjar sueños en el pasado y realizarlos en el presente, construimos un legado del cual los que vengan después podrán beneficiarse, siempre guiados por la esperanza de un futuro mejor.
Estos 25 años representan mucho más que un simple aniversario; son el reflejo de nuestra historia y del ideal que llevamos en nuestro nombre: Sagrada Familia. Este nombre simboliza los sueños y aspiraciones de nuestros fundadores, y continúa guiando nuestro caminar. Alcanzar este ideal no es un logro inmediato, sino un regalo de Dios que conquistamos a través de esfuerzo y dedicación. Como comunidad, lo hemos adoptado como parte fundamental de nuestra identidad. No solo estamos llamados a alcanzarlo, sino a vivirlo plenamente cada día, porque es lo que Dios ha deseado para nosotros. El Colegio Sagrada Familia cree firmemente en este ideal y en la comunidad que juntos seguimos construyendo.
En un mundo donde lo comunitario cobra una importancia cada vez mayor, ser fieles a nuestra esencia es vital. Ante los desafíos, recordaremos lo que significa pertenecer a esta gran familia, y será esa fidelidad a nuestra identidad la que nos permitirá avanzar con fortaleza y esperanza.
Al cierre de la misa, se rindió homenaje a los profesores y administrativos que han sido parte esencial de estos 25 años de historia. Entre ellos, se reconoció a Paulina Herrera, Paulina Carvajal, Luz María Maldonado, Patricia Loosli y Silvia Maldonado, quienes con su dedicación han contribuido significativamente al crecimiento de nuestro colegio.
Damos gracias a la Mater, a Dios y a todas las personas que han formado parte de este proyecto durante estos 25 años. Juntos seguiremos trabajando para que este ideal perdure y continúe iluminando el camino de las futuras generaciones.