
De una manera muy particular se vivió este Domingo de Ramos tras la Pandemia que se está viviendo a nivel mundial.
Comunidades alrededor del mundo se congregaron de manera virtual para recordar la Pasión de Cristo que nos lleva a los últimos días de Jesús. De esta manera, en cientos de parroquias e iglesias se pudo escuchar la palabra de Dios, quien nuevamente nos invita a reflexionar sobre cómo hemos llevado nuestras vidas y de qué manera podemos encausarla.
Como Comunidad Sagrada Familia, pudimos participar de la Eucaristía que celebró el Padre Pablo Pol en el Santuario de Alemania y en el cual nos recordó del papel que tuvo Judas en la vida de Jesús, invitándonos a reflexionar en cómo decidimos vivir la nuestra. “Queremos vivir como un Judas que traiciona, un Judas ambicioso o un Judas que se arrepiente”, indicó.
Así mismo, nos invitó a vivir esta Semana Santa como una instancia para descubrirnos a nosotros mismos y reencontrarnos con Jesús, abriendo nuestros corazones y reconociendo nuestras debilidades y oscuridades.
Como es tradicional, al inicio de la misa el Padre bendijo los ramos de quienes participaron presencial o virtualmente de esta ceremonia litúrgica, que marca el inicio de la Semana Santa y el fin de la Cuaresma. Ramos que suelen ser con hojas de olivo y palma y que representan la renovación de la fe en Dios, su bendición, protección y ayuda.
Los invitamos a armar sus ramos en familia y colocarlos en las puertas de sus casas y de esta forma abrir y reconocer a Jesús como parte esencial de nuestras vidas y hogares.